viernes, 27 de noviembre de 2009

Crepúsculo, cómo te queremos


Hey ho! No tenía nada muy interesante que contar últimamente, demasiadas cosas no creativas que hacer! Pero leyendo críticas y sorna sobre Crepúsculo, esa gran obra (perdón, saga) literaria con la que Stephanie Meyer ha decidido mejorar el mundo, encontré una parodia bastante graciosa sobre los primeros días de Edward y Bella, incluyendo una explicación poco convencional sobre la portada del libro...

El relato original podéis encontrarlo aquí: Estadísticas curiosas sobre Crepúsculo, un poco después del número de veces que la belleza de Edward es descrita en el primer libro. Su autora me ha permitido traducirlo para vosotros no internet-adictos.

Y recordad, las pelis siempre serán mejores porque los protas están to buenos y no hay que sufrir perlitas como: "Yacía perfectamente inmóvil en la hierba, su camisa abierta sobre el pecho esculpido, incandescente, sus brazos centelleantes desnudos".

Seriously, W T F.

Y aquí os dejo mi traducción. La autora original ha intentando ser todo lo fiel posible a los adjetivos usados por (el diccionario de sinónimos) de Meyer, pero yo he tenido que usar mi "imaginación". Que lo disfruten ustedes.







Atardeceres

Edward se inclinó hacia mí, su rostro perfecto a centímetros del mío. Su aliento, dulce y delicioso, cubrió mi cara. Sus ojos dorados brillaban de amor.

“¿Qué te parece...?” susurró, su voz aterciopelada ronroneando en mi oído.

No pude responder, abrumada como estaba por su piel centelleante. Brillaba como un diamante al sol, una criatura divina ante mí.

Sonrió burlón ante mi confusión, pero entonces, su rostro oscurecido, tronó: “¡No te hagas la difícil, Bella!”

Me encogí de miedo, pero su expresión se suavizó inmediatamente, con una carcajada clara y resonante, y se inclinó hacia mí de nuevo. Sus dedos, fríos y pálidos, acariciaron mi mejilla. Dejé de respirar.

“Ven aquí”, dijo, levantándose con uno de esos movimientos más rápidos que el relámpago a los que me había acostumbrado. “Quiero mostrarte algo”.

Me llevó a una cañada. Él pisó elegantemente en la hierba empantanada de la ribera. Yo tropecé con un canto rodado y acabé de cara en el barro. Edward rió. ¿Cómo era posible que me amara? Él, que es tan guapo, bello y perfecto. La estatua de David hecha hombre. Un Adonis, un dios, un ángel.

Se quitó los zapatos, remangó el bajo de sus vaqueros y tuve que ahogar un gritito ante la visión de sus tobillos, blancos y suaves. La luz del sol se reflejaba en las uñas de sus pies, cada una un brillo nacarado de perfección. Nunca antes había visto sus pies. Nunca pensé que pudiera ser más atractivo de lo que ya era, pero parecía que su belleza no conocía límites.

Mi corazón latiendo alocadamente en mi pecho, se escapó hacia mi garganta, rebotó en media docena de costillas y finalmente se aposentó en algún lugar cerca de mi rótula. Me desmayé.

Más rápido que una bala, Edward me levantó en sus brazos marmóreos y me acunó contra su pecho de granito. “¿Bella? ¡Bella!”, gritó, “¡No!”

Pero la visión de su cara perfecta y gloriosa retorcida en una mueca de angustia inundó de tortura mi cuerpo. “¡Edward!” logré exclamar.

Sus labios fríos e infatigables presionaron los míos, pero no me atrevía a moverme por miedo a romper su control, tan irresistible era para él el perfume de mi sangre. No podía tolerar el saber que había causado dolor a Edward forzándole a comerme. Mi corazón revoloteó alrededor de mi rótula.

El beso acabado, Edward me puso en pie. Sin moverme, tropecé con un palito y hubiera caído en el arroyo de no ser por Edward, que me sujetó en su abrazo férreo.

“¿Responderás a una pregunta, querido?” le interrogué.

“Por supuesto, mi amor... mi vida, mi todo”, Edward dijo, destrozando piedras distraídamente con los dedos de sus pies. Le observé, hechizada por un momento, antes de recuperar la compostura.

“Una vez te pregunté si podías convertirte en un murciélago y tú simplemente te reiste”

Otra vez esa mueca. “Era una pregunta estúpida. No nos convertimos en murciélagos. ¿Por qué ibamos a hacer eso?”

“¿Pero... te puedes convertir en algo?”

“Por supuesto”. Se estiró, y su camisa se levantó lo suficiente como para dejar entrever sus abdominales esculpidos. Hiperventilé y me desmayé.

Cuando desperté, Edward estaba hablando.

“... como disfraz”


“¿Qué?”, pregunté sin aliento.

“Dije que nos convertimos en fruta. Es perfecto para pasar desapercibido”. Me observó cuidadosamente, preguntándose si esta revelación sería la que me convenciera por fin de que era un monstruo y me hiciera irme, gritando, de su lado.

“Oh.” Dije. “¿Qué tipo de fruta?”

Parecía frustrado, molesto, eufórico, asustado, nervioso, gruñón, divertido, somnoliento y triste. Como un arcángel venido de los cielos que me bendecía con su presencia. “Una manzana”.

“Oh. ¿Puedo verlo?”

La furia enrojeció sus rasgos. “¡No!” ¡Qué es lo que no entiendes? ¡Soy un peligro para tí! ¡Podría matarte! ¡Debería abandonarte, para siempre!” Se abalanzó sobre mí y me envolvió con sus brazos. “Debería irme, ¡ahora mismo! Es la única manera de que estés segura.”

La desesperación me inundó, tan densa y pesada que me nublaba la visión. “¡No, Edward! No me dejes. ¡Sé que sólo hemos estado juntos tres horas, pero quiero pasar la eternidad contigo! ¡Por favor!

Se retiró y me miró intensamente, miles de emociones agitándose en sus ojos de topacio líquido. “¿Lo dices de corazón, Bella?”

“Sí”

“Muy bien. Que así sea”

Su rostro glorioso, perfecto, celestial se inclinó hacia mí, y sus labios frígidos tocaron mi cuello. Rugió profundamente en su garganta, un sonido que recorrió mi columna como un rayo.

Entonces vino un dolor, un dolor agudo. Su abrazo se hizo más fuerte. Gemí su nombre. Mi vista se oscureció hasta que lo único que podía ver era el brillo de su piel, llamándome al paraíso.

Y después, nada.



*****


Edward observó el cuerpo de Bella Swan, pálido y sin vida en sus brazos pálidos y sin vida.


“Ups.”

Sus sollozos sacudieron el bosque durante seis largos segundos. Despues, erguido, limpió una gota de sangre de la comisura de sus labios.


“Ñam.“


Corrió hacia el borde del bosque, más rápido que ninguna criatura viviente, mientras se preguntaba si esa chica, Ángela, querría ser su nueva compañera de laboratorio...




FIN


martes, 16 de junio de 2009

Birra, birra... birrete!

Y como viene siendo habitual, este blog se ha convertido en oootra manera de no hacer lo que debo, a altas horas de la madrugada. Pero no os preocupéis, además de nocturnidad, hay alevosía y ensañamiento. Nada premeditado, lo de planear... ya sabéis que no es muy mío.

Pues estábamos esta tarde jugado a llenar la caja de Bud Lights con botellines vacíos (objetivo conseguido, aunque entre diez) con la excusa de que Rrrro ya es tan viejo como yo. Y caigo ahora, en que, joder, esa cerveza está malísima!!

Vale, no es el sudor de pollo a medio destilar que ponen en Duffys los xiércoles, pero no se achanta. En cuanto deja de estar muy fría, el sabor aparece, y ya puedes acabarla rápido o coger otra, porque como tu lengua anestesiada sienta algo, vas jodido. Vamos, comparada con la Guiness, (sí, sí, morena y no "rubia"), incluso con la aguada que sirven aquí... me asombro de las cajas que llevaré vaciadas este año. Supongo que es una cerveza de compromiso, flojilla, sin nada especial, con muy pocas calorías (como un sundae del McD, juas) y que no se sube mucho.

Pero ah... ya sé por qué la bebo! Tiene los mejores anuncios!

Vómito enlazante incoming:



El último, pelín friki: Breath of Fire

PD: No mencionéis los de Heineken, me acabo de acordar... aunque creo que estos son más graciosos

Y para acabar esta humeante pile of crrap (si veréis, al final no escribo mucho porque se me ocurren pocas cosas interesantes...), las obligadas referencias en masse a la Wikiwiki (ahora, con un 20% más de pedantería francófona!):




PD2: Por si no lo habéis visto, en vez de fliparme de la manera habitual explicándoos algo que no os interesa y que tiene una relación vaga con algo de la carrera (o no), he abusado del botoncito de enlace del editor de texto! Ay, mil perdones. La próxima vez lo pensaré un poco (una miaja, no más) y encontraré algo chachipiruli que contaros.

PD3: La graduación americana está overrated. Me aburrí más o menos lo mismo que viendo a George Foreman vender grills. Oh, how the mighty have fallen.

PD51238: Solo pongo tantos enlaces para que os hagáis adictos a las pestañas como yo. MWAHHAA


viernes, 24 de abril de 2009

Cambios, cambios, cambios!

Este propósito de año nuevo empieza después de estar toda la noche despierto! (Gracias, muestra gratuita de Venom, gracias Alberto). No habiendo hecho nada de provecho y dándome ya más asco de lo normal, he decidido salir del círculo vicioso de autocompasión que lleva a hacer lo que sea para pasar el rato, provocando más autocompasión... etc, etc.

Así pues, castigándome a mi mismo sin sueño hasta después de comer, voy a aprovechar este día para compensar el cuasi totalmente perdido día de ayer, y hacer las cosas que me gustaría hacer y que no hago por desidia. Para hoy...a saber: escribir algo aquí, tocar un poco el piano en vez de dejarlo para el final, empezar el proyecto de "la china", escuchar música nueva en vez de las listas de siempre y NO PERDER EL TIEMPO CON CHORRADAS EN INTERNET. Sorry caps :)

A vosotros os da igual, probablemente, pero escribiéndolo aquí parece más serio y vinculante. Tengo la esperanza de que materializarlo de esta manera me ayude a cumplir mi propósito. Nuevo pHonta, aquí vamos!!

PD: Intentaré hacer(me) un informe de los avances, aunque sea para daros la oportunidad de escribir "Ya te lo dije..."

PD2: Tengo muchas ganas de ir a parques de atracciones en el viaje post exámenes!!! Incredible Hulk, there we go!

PD3: Sipp, parte de las donaciones de la Wikipedia van destinadas a sobornarme para que ponga 4 o 5 enlaces a ella por entrada...

miércoles, 25 de febrero de 2009

Proyecciones! (ruidosas)

Proyecciones, sí! Y no precisamente de películas Oscarizadas. Por cierto, estuvimos viendo la ceremonia en "directo" por la tele el otro día, chez M&A y fue un poco decepcionante. Sí, sí, había momentos interesantes (a las chicas se volvían locas esperando miradas de odio entre Angelina y Jennifer). En general, sin embargo, me pareció lenta, las actuaciones (excepto la primera) poco afortunadas y los discursos un tostón.

Pero vamos a de lo que os quiero hablar. En un libro sobre tomografías (para el proyecto) que andaba mirando me hablaban de como reconstruir un objeto a partir de sus proyecciones. Claro, esto está rechupi para observar partes del cuerpo sin tener que andar viviseccionando, a la Dexter. El caso es que Fourier, cómo no, tiene algo que decir (Teorema de la rodaja de Fourier para los (JUAS) interesados). Lo que nos concierne a nosotros es que para recuperar el objeto en cuestión a partir de algo como esto:
(Ahí podéis ver un par de focos aviesos proyectando sombras maliciosas)


necesitamos el mayor número de "sombras" posibles. Cuantas más tengamos, mejor, más nítido y preciso será el objeto reconstruido. Y entonces, pateando nieve por el campus, recordé una frase de un anime infame (Evangelion): "Tú no eres más que las imágenes que los demás tienen de ti".

Tú mismo también tienes una imagen de tí, claro, pero eso no cambia lo que quiero decir.

Se me ocurrió entonces que se puede establecer un paralelismo entre la gente y estos objetos, entre cómo les vemos nosotros y las proyecciones. Una sola persona puede recordar varias imágenes de otra, por ejemplo, si le conoce en diferentes ámbitos (trabajo, casa, juergas, etc). Pero, ¿cuántas veces tenemos suficientes proyecciones de alguien para saber quién es realmente?

No tardamos en juzgar o formarnos una opinión, sin más que un vistazo rápido a una de sus sombras. Muchas veces nos pasa que, hablando de una persona con otra descubrimos que la imagen que ellos tienen no se parece a la nuestra. Y esto no quiere decir que uno de los dos esté equivocado.

¿Es posible entonces conocer a alguien completamente? (¿O lo que es peor, hay un teorema de Nyquist para esto, diciendo el número de personas o facetas que tienes que adquirir? ;))

Bueno, habréis llegado aquí y pensaréis que no os he contado nada nuevo y/o que desbarro sobre la carrera. En ambos sentidos. Y así es. Pero me sorprendió que cosas tan completamente apartadas puedan llegar a guardar relación. Sospecho además que algún filósofo habrá tratado esto ya (las sombras y las personas no son nuevas precisamente...), así que quizá alguien pueda apuntarme en la dirección correcta.

Aburridérrimos lectores, me vuelvo a los deberes y al pan con Philadelphia, que no es Philly cheese steak, pero está a mano!

PD: Y no hablemos del ruido, que lo corrompe todo! Ni de la imperfección de los sensores (nosotros...). Todo problemas, con la gente y con las imágenes.
PD2: Así en relación con los deberes de Computer Vision con los que estoy, se me escurre que para obtener una imagen limpia de alguien, probablemente también funcione hacer la "media" de las proyecciones que todos los demás tienen de ella. Y aaaaaa dormir!

martes, 17 de febrero de 2009

Fiery Lousiana!

Siendo lo pesado que soy, seguro que os dije a la mitad que este próximo fin de semana pretendía ir a Nueva Orleans, aprovechando que celebran Mardi Gras, pasando por San Louis y Memphis (Elvis!).



Tiene pinta de que al final no va a salir: no veo a la gente muy animada, el viaje de Spring Break se acerca, y hay cero ganas de hacerme el equivalente a un viaje a París yo solo en coche, ida y vuelta. Aun así, esto queda en la recámara, y en cuanto les pille un finde más libre, y hasta Agosto hay tiempo, there we go!

Sobre el Mardi Gras, carnaval salvaje europeo-americano-cajún, podéis encontrar más info facilmente, así que os hablaré de algo menos conocido.

Nueva Orleans quedó muy maltrecha tras el Katrina, y una de las consecuencias más "graciosas" de las inundaciones fue la gran cantidad de frigoríficos que quedaron inútiles. La gente los sacaba fuera para que fueran recogidos, y en ocasiones los adornaban con algún tipo de mensaje, chistoso o macabro. Según pasaban las semanas, esto dio paso a grafitis y pinturas, algunas muy elaboradas. Podéis ver más en la Wikipedia y en este blog, pero aquí os pongo un par que me han gustado






Nota: Si véis a un tal Brown nombrado, se refieren a este señor, y levee significa dique...


La otra cosilla que me lleva a fliparme con el título es una salsa con la que me he tropezado en la cafetería de la universidad, el commons. Algunos ya sabréis que me encanta el picante, y probar todo tipo de comidas y bebidas, así que no me pude resistir a esto (atención al nombrecito):

Una de las razones más fuertes para ir al sur es la comida cajún, cargada de sabores fuertes. Sin embargo, no soy lo suficientemente listo como para echarme una gota nada más, así que el taco (Taco Thursday era!) quedó bien cargadito. El resultado acabó en un vídeo que espero nunca vez la luz ni Youtube, pero baste decir que incluye sofocos y lágrimas. Totally unexpected!! Pasado el mal rato, ya en casa, Googleé:

Dave's Ultimate Insanity Sauce. Disclaimer: Use this product one drop at a time. Keep away from eyes, pets and children. Not for people with heart or respiratory problems.

Creo que no hace falta traducir nada de eso. Es verdad, sobre todo lo de los ojos. Ouch.

PD: Aun así, volvería a hacerlo, como dice un random por ahí: ...the taste isn't the appeal here, the heat makes my body feel cleansed and strong after it goes away.... A+!!

A saber: El gusto no es lo atractivo; tras desvanecerse, el calor me hace sentir el cuerpo purificado y fortalecido . Sobresaliente!!

Juas, me ENCANTA el picante.

PD: Este mes es el mes de la historia negra y ponen comida sureña en el commons. Yay!